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Desde el octágono; Ryan Bader más cercano al título

El ascenso por la escalera de la fama fue llamativamente muy rápido: Ganar The Ultimate Fighter significa catapultarse al estrellato. Pero con eso solo no alcanza y hay que sustentar esas victorias con otras de aún mayor calibre. Y Ryan Bader lo hizo venciendo a Keith Jardine y colocándose en la lista de posibles aspirantes al cinturón de campeón.
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El próximo sábado su rival será Antonio Rogerio “Minotoro” Nogueira, uno de los mejores semipesados, en la pelea co estelar del UFC 119. El ganador estará muy cerca de un combate por el cinturón que hoy posee Mauricio Rua y ese es el sueño que desvela a Ryan Bader.
 
“Es un honor tener la oportunidad de enfrentarme con alguien del calibre de Rogerio. He visto y seguido por mucho tiempo su carrera y la de su hermano así que sé lo que suele hacer. Es mi tiempo justo para recibir esta oportunidad, mi objetivo principal es ser campeón y ganarle a Nogueira me pondría muy cerca”, comenta Bader.
 
Siendo uno de los pocos invictos que aún se mantiene en la división (12-0, como profesional), poner la primera mancha en el record hasta ahora indestructible es una buena prueba para cualquiera. Y, al estar en la división más complicada y plagada de talento, ese 0 en el casillero de las derrotas es algo muy difícil de mantener.
 
“Creo que estoy en la división más dura y complicada. Probablemente hay 7 peleadores que pueden ser campeones y que se pueden vencer entre ellos cualquier día. Nadie se puede permitir tener una mala noche porque, si no se puede ganar, los aspirantes delante serán muchos más”, reflexiona.
 
Bader entrenó en The Ultimate Fighter con Minotauro Nogueira por lo que conoce algunos de sus secretos. Por eso considera que esa experiencia ha sido muy importante ya que le ayudó a saber dónde debía enfocar su preparación.
 
“Seguramente que entrenar con su hermano Rodrigo me ayudó, pero no de la forma que la mayoría creería. Me ayudó porque, de no haberlo hecho, no hubiera sabido cuán duro tenía que entrenar para hacerle frente a uno de ellos”, reconoce Ryan.
 
Mientras que también comenta cómo fue su entrenamiento con su equipo Arizona Combat Sports del que también son parte Aaron Simpson y CB Dollaway.
 
“Siempre intento mejorar en todo, pero tengo algunas prioridades. Mantuve mi foco en el intercambio de golpes, en el Jiu Jitsu y en la resistencia física. Una de mis metas es ser mejor peleador cada vez que ingreso al octágono y creo que esta vez me saldrá muy bien”, explica.
 
Pero, a la vez, muestra que tiene los pies en la tierra y que no mira más allá de su próxima pelea: “En este deporte hay que ver las peleas de a una y no pensar más adelante. Quiero ganar el título, pero antes tendré que ganarle a Rogerio”, concluye Bader.
 
Ryan Bader es uno de esos peleadores que siempre atraen a los seguidores: Mano derecha con poder de nocaut y, además, un excelente dominio de la lucha que lo ayuda a derribar a sus oponentes y dominarlos en el piso. A sus 27 años está mejorando a pasos agigantados y, de seguir así, no se hará demorar su oportunidad titular.